¿Qué son los incendios de sexta generación?

No lo decimos nosotras, lo explica la comunidad científica. Los incendios de sexta generación han llegado para quedarse. El acusado cambio climático y el abandono de los bosques han acelerado la aparición de una nueva tipología de incendios: los megaincendios o incendios de sexta generación. Aunque los grandes incendios son cada vez más comunes, solo puede calificarse como incendios de sexta generación los que modifican las condiciones meteorológicas de la zona. Estos tienen la capacidad de derivar en tormentas de fuego y su comportamiento es impredecible e imposibilita su extinción. ¿te interesa conocer más sobre este tema? Vamos a por ello.

¿Qué son los incendios de 6.ª generación?

Los incendios de sexta generación son aquellos que tienen la capacidad de modificar las condiciones meteorológicas de la zona afectada por las llamas, así como su entorno más inmediato. Se trata de fuegos rápidos y agresivos, cuyas llamas llegan a superar la velocidad de 6 km/h, una cifra entre seis y doce veces por encima de lo normal. Son incendios devastadores e incontrolables, que resultan muy peligrosos, ya que no podemos anticiparnos a ellos en ningún momento. Algunas de las causas de la aparición de estos incendios son la acumulación elevada de biomasa, debido al abandono de espacios forestales y agrícolas, junto con las sequías y las altas temperaturas.

Para que te hagas una idea, la comunidad científica en su conjunto ha catalogado como incendios de sexta generación en España los sufridos en Sierra Bermeja (2021) y en Tenerife (2023).

Evolución de la superficie quemada en España según el informe sobre incendios forestales 2023 de WWF.

¿Cuántas generaciones de incendios hay?

A la hora de hablar de incendios, tenemos en cuenta una serie de características según las cuales los incendios pueden clasificarse en seis tipos o generaciones.

  1. Incendios de primera generación: son aquellos cuya propagación está condicionada por una disponibilidad continua de combustible en superficie, principalmente herbazales y arbustos, fruto de un abandono de los campos de cultivo. Son incendios de mediana intensidad, en los que se queman entre 1 000 y 5 000 hectáreas de media y cuyas medidas de extinción se basan en efectivos locales y bomberos estacionales. 

  2. Incendios de segunda generación: son incendios más rápidos e intensos que se propagan puntualmente con focos secundarios. Su superficie oscila entre las 5 000 y 10 000 hectáreas y hacen falta medios aéreos para su extinción. 

  3. Incendios de tercera generación: estos incendios se caracterizan por un fuego que se propaga a través de las copas de los árboles. Alcanzan una alta intensidad debido a la inestabilidad y suelen aparecer tras una mala extinción de incendios de media y baja intensidad, aunque también aparecen como consecuencia de las olas de calor. Las oportunidades de extinción son escasas y los rápidos cambios de comportamiento hacen que sean impredecibles.

  4. Incendios de cuarta generación: son grandes incendios que se propagan por la masa forestal, pero también atacan jardines y casas debido a la continuidad de vegetación entre la zona forestal y la urbanizada.

  5. Incendios de quinta generación: se producen cuando convergen grandes incendios forestales al mismo tiempo en diferentes zonas de riesgo. Aparecen fuegos de copas simultáneos, que atacan por igual las zonas forestales y las urbanizadas. Los medios de extinción convencionales son incapaces de controlarlos y requieren una estrecha coordinación entre los diferentes cuerpos y agentes de extinción. 

  6. Incendios de sexta generación o megaincendios: como ya hemos comentado previamente, son incendios muy extremos e impredecibles que causan daños permanentes en las áreas en los que tienen lugar.

¿Por qué hay tantos incendios en España?

Llegados a este punto, quizás surja la pregunta de por qué hay tantos incendios en España. Pues lo cierto es que, aunque en los últimos años la situación se haya acentuado, España siempre ha sido una zona con tendencia a incendiarse. Esto se debe a las características propias del clima mediterráneo, con veranos muy secos y con altas temperaturas.

Sin embargo, no fue hasta la segunda mitad del siglo XX que la situación empezó a ser preocupante, siendo la principal causa el éxodo hacia las ciudades y el abandono de la actividad rural. Desde entonces, los bosques han crecido sin control ni mantenimiento y muchas especies salvajes han invadido los antiguos campos de cultivo. Estas zonas se convierten en bombas de relojería en los que el fuego, a veces inevitable en verano, se propaga con suma facilidad, generando megaincendios o incendios de sexta generación.

¿Cuál ha sido el peor incendio de España?

En los últimos años, hemos visto cómo los incendios son cada vez más frecuentes en España, especialmente en verano. De todos ellos, el más grave fue el que tuvo lugar en la Sierra de Culebra (Zamora) el verano de 2022. Según los registros, en este incendio se quemaron casi 35 000 hectáreas en la región de Losacio (Zamora). La provincia vio arder hasta el 6 % de su superficie en la serie de incendios que tuvo lugar aquel verano. Además, cuatro personas perdieron la vida, 14 pueblos fueron evacuados y la población de lobos ibéricos de la zona descendió de una manera drástica.

Dentro de la escala que mide la gravedad de los incendios, los megaincendios o incendios de sexta generación son los más peligrosos. Estos incendios impredecibles y muy importantes llegan a dejar una huella permanente en las zonas a las que atacan. Aunque, debido al clima Mediterráneo, España siempre ha sido una zona muy proclive a sufrir incendios, en los últimos años la situación se está volviendo cada vez más extrema. El abandono casi absoluto de las zonas rurales, que crece sin control, junto con la sequía y altas temperaturas fruto del cambio climático, hacen que cada verano veamos arder áreas cada vez más extensas.

Os lanzamos una pregunta, ¿somos conscientes de las consecuencias que tendría un incendio de sexta generación en Ibiza?

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¿Por qué debería preocuparnos la salud de nuestros bosques?